Mi última entrada en el blog fue en julio de 2018, y desde entonces hasta hoy, nada menos que seis meses después, mi actividad en radio ha estado muy limitada precisamente como consecuiencia de ese eslabón más débil que menciono en el título.
Gastamos importantes cantidades de dinero en tener el mejor equipo, las mejores antenas, micrófonos, accesorios, etc, y en ocasiones un simple e ínfimo error puede dar al traste con nuestra posibilidad de hacer radio, dejando a nuestra cara instalación en stand by hasta que seamos capaces de encontrar ese elemento que ha fallado.
En 2016 volvía a la radio con la instalación de mi actual antena, la Hexbeam, una directiva económica, de tamaño reducido, multibanda y con excelente relación de ROE en todas las bandas. Durante dos años volví a disfrutar de la radio sin ningún problema técnico achacable a mi instalación. Sin embargo, un buen día, sin previo aviso, mis equipos se quedaron sordos. Algo iba mal. A las pocas horas, como por arte de magia, todo volvió a la normalidad. Sospechoso.
Localizando el causante del problema
Viví la situación anterior durante unos cuantos meses, con espacios de horas o días en los que la hexbeam se quedaba sorda sin motivo aparente volviendo a la normalidad algún tiempo después, hasta que un buen día dijo basta de forma definitiva. En la imagen de arriba está el kit de la cuestión.
Desde un primer momento sospeché de ese conector PL en L. Al que escribe, que no es precisamente un manitas con el soldador, y pese haber revisado todo antes de subir la antena a la torre, nunca le ofreció especial confianza aquel conector. Sin embargo, tras casi dos años de funcionamiento mis reticencias quedaron disipadas, hasta que falló.
El problema solo podía estar en el latiguillo que une el choke RF con la antena, en el propio choke, o en el cable de bajada. El sentido común me decía que dificilmente habría fallado el choke o el cable.
¿EL CABLE?
En la fotografía véis el estado del coaxial a la altura de la abrazadera del dipolo para 40m. La rotura pareciera que se produjo por el rozamiento constante del cable con otro elemento pero, ¿con cual? No hay elementos tan abrasivos en la antena y no se producen rozamientos tan continuos como para provocar esos efectos, ¿o sí?
PUES SÍ
Buscando imágenes antiguas de la antena que me pudieran dar una pista localicé ésta, donde, si nos fijamos, vemos el trozo de cable dañado y su colocación, justo en la placa que sustenta al dipolo de 40m. Parece claro que ha sido alguno de los tornillos los que con el giro del rotor y el consiguiente movimiento del cable han ido pelando esa zona del mismo con el paso del tiempo.
De vuelta a empezar
Subir y bajar mi antena no es precisamente una tarea sencilla. El edifcio donde está colocada, la ubicación de éste, las calles adyacentes, todo se une para que afrontar la bajada de la misma sea una pequeña odisea, pues obligatoriamente la operación ha de hacerse desde un camión grúa con cesta en la que se sube el encargado del trabajo que, dado mi amor por las alturas, no soy precisamente yo. De modo que a todo lo anterior hemos de unir la dependencia de terceros para poder hacer la operación. Sí, son las peores condiciones posibles, pero son las que tengo. Afortunadamente Miguel y Óscar, EA7ATJ y EA7ATA, siempre están ahí cuando hacen falta, y una vez más me ayudaron a hacer la operación, que concluimos en un par de horas de trabajo.
Una de las características de la hexbeam es su gran tolerancia al fuerte viento gracias a su bajo peso y poca superficie de exposición al mismo. Sin embargo la ubicación del edificio donde está montada, totalmente expuesto a vientos, sin ninguna construcción o elemento natural que lo resguarden, hacen que el conjunto esté sometido a fuertes rachas, sobre todo en invierno.
En la imagen inferior se observa como estaba la antena antes y después de hacer la operación, así como el mástil Televes 3009 (40mm diámetro, 2mm de pared) tras dos años en el tejado.
Preparado para cualquier eventualidad
Como he comentado no es una tarea baladí subir y bajar mi antena, de modo que tenía que contemplar todos los posibles escenarios:
- Fallo del choke RF
- Fallo del conector en L
- Fallo del coaxial de bajada
En teoría, teniendo preparado un nuevo choke de RF, un nuevo latiguillo de unión de éste con la antena y una buena cantidad de metros de cable coaxial, debería tener resuelto el problema de la antena, fuera cual fuera éste. Adicionalmente, dado el estado del mástil, completamente doblado, aproveché la coyuntura para instalar uno de mayor diámetro y espesor. Mejor dicho, me lo fabriqué.
Reforzando el mástil
El diámetro máximo de mástil que soporta mi torreta es 45mm, pero el que proporciona Televés tiene, igualmente, 2mm de pared. Quería, además de ganar en diámetro tener más espesor, reforzando al máximo este elemento. La antena Hexbeam tiene un tubo de 35mm que entra perfectamente en un Televés 3009, con un diámetro exterior de 40mm y uno interior de 36mm, de modo que la solución fue sencilla: introducir un 3009 dentro de un 3010 (cortado a 2.5m) y soldarlo por los extremos. De esta forma dejé preparado un mástil con 2.5m de altura, 45mm de diámetro y 4mm de espesor. A ver qué tiene que decir Eolo al respecto.
Instalando un nuevo choke RF
Ante la posibilidad de algún fallo en las conexiones internas del choke RF instalado, decidí tener uno de repuesto para cubrir tal eventualidad. En este caso el encargado de suministrármelo fue el amigo Alberto EB4HRA, al que, por cierto, he de darle las gracias por la premura en la fabricación de mi choke
Aproveché las circunstancias para, guiado por los consejos de EB4HRA, cambiar el modo de sujección del choke al mástil de la hexbeam, atornillando el mismo a una placa de aluminio y ésta al mástil, quedando el conjunto instalado de forma mucho más firme.
En este punto recuerdo la no obligatoriedad de la instalación del choke en la hexbeam, pero sí que su más que recomendable colocación, evitando bajadas de RF por el coaxial y mejorando la relación frente espalda.
Finalizando la instalación
Finalmente, gracias a la inestimable ayuda de EA7ATA y EA7ATJ, y tras descubrir el cable desgastado y pelado, aproveché para colocar el nuevo coaxial que tenía preparado, el choque fabricado por EA4HRA y el fatídico latiguillo que une éste a la hexbeam (que, después de todo, era el causante de que estuviera sin antena). Dos horas de trabajo que no me pesan, todo lo contrario, salvo por el hecho de que tengo que molestar a terceras personas.
Conclusión
Aunque pueda resultar una obviedad, debemos tener muy claro que pequeños e ínfimos detalles, como una mala soldadura en un lugar de difícil acceso, puede dejarnos, literalmente, sin hacer radio. En mi caso un conector mal soldado en el lugar más inaccesible, y un cable coaxial simplemente mal colocado, hicieron que estuviera seis meses sin poder salir entre 6 y 20m.
Gracias Oscar. Gracias Miguel.