En el mundo de la radio, como en el resto de ámbitos de la vida, tenemos elementos de la más diversa índole, y no nos faltan los listos que hablan sin conocimiento de causa de los más diversos temas. No, los radioaficionados no nos libramos de ellos, como tampoco de aquellos que defienden lo suyo a capa y espada por encima de argumentos técnicos objetivos o comportamientos empíricamente demostrados. Como en la vida, el que mira por encima del hombro al resto no es un especímen del que nos libremos en esta afición.
¿Por qué la introducción de arriba? Porque, sin entrar a mencionar indicativos ni dar más detalles, el otro día cierto radioaificionado me decía, con sobrada vehemencia y prepotencia, que la hexbeam es poco más que una antena de compromiso. Ante semejante afirmación, y dado que era una persona con la que no tenía confianza para entrar en más disquisiciones, callé y seguí la charla como si no hubiera oído nada. Ni que decir tiene que su comentario, además de otros en la misma línea, fue suficiente para que calara al personaje en cuestión.
Sin embargo, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid y porque estoy convencido de que ese comentario lo irá dejando en los más diversos lugares sin sonrojo alguno, aprovecho para dejar un breve post sobre la mencionada antena para que quien llegue aquí tenga un elemento de juicio más objetivo que los comentarios de ciertos iluminados.
Los ávidos cazadores del DX, los incansables en busca de una nueva entidad, los que buscan el 5BDXCC, saben y tienen la certeza matemática de que determinados comunicados en ciertas bandas solo pueden realizarse a unas horas muy concretas, que no son otras en las que doña propa suele mostrarse benévola para abrirnos ventanas, más o menos amplias, en las que realizar ese ansiado comunicado. Estas ventanas son más estrechas cuanto más bajas son las bandas, siendo especialmente críticas en 80m y no hablemos ya de los 160m. Estas señoras de la noche nos van abandonando conforme llegan el alba y los primeros rayos de sol, relegando los comunicados realizables a prácticamente nada. Sin embargo, nuestros amados 40m, esos que usamos a diario para mantener comunicados nacionales con buenas señales durante todo el día, no tienen un comportamiento tan crítico. Esta banda, que como las anteriores vive de noche, suele ser bastante cortés y considerada con los radioaficionados menos escrupulosos y concienzudos a la hora de planificar un determinado comunicado. De esta forma, siempre, en mayor o menor medida, nos da un periodo de gracia antes de irse a la cama, durante el cual se pueden hacer interesantes comunicados, cruzando el charco con relativa facilidad en función de como esté doña propagación que es, después de todo, quien dicta qué comunicados son realizables en determinadas bandas y horas. Durante ese periodo de gracia los comunicados nacionales, normalmente, son aún muy complicados.
Aunque no tiene nada que ver con la radioafición sí que quería hacer una mención a otra afición que me acompaña desde hace unos años y que, curiosamente, he observado que también es seguida por muchos radioaficionados. No se trata más que de la meteorología y la relativamente frecuente puesta en marcha de estaciones meteorológicas por parte de radioaficionados.
Aunque en la web ya hay unos apartados para consultar los datos recogidos por la estación, que lleva en funcionamiento desde 2015, he querido dar un paso más adelante y darle entidad propia. Esto ha sido posible gracias a meteotemplate, una plantilla para software meteorológico que en realidad es mucho más que un mero template por la cantidad de opciones, tablas, estadísticas y datos que ofrece usando para ello la base de datos de los datos recogidos por la estación.
Si habéis pasado por el apartado la radio que hago y tenido la paciencia suficiente para leer todo el artículo completo, habréis descubierto como entre los muchos modos que no trabajo están los digitales. Nunca me han llamado la atención y siempre he renegado de ellos, eso sí, respetando a quien le gusta trabajar en este modo. Sin embargo, como buen radioaficionado, el gusanillo de la experimentación ha aparecido y me he decidido a darle una oportunidad para, por lo menos, poder renegar, si fuera el caso, con conocimiento de causa.
En el momento de escribir estas líneas, enero de 2018, hay un modo digital por excelencia que ha desplazado al ya obsoleto RTTY o al reciente y exitoso PSK31, relegándolos a un espacio marginal dentro del mundo de los modos digitales. En los próximos párrafos descubriréis por qué, aunque se resume en pocas palabras: rapidez y comodidad.
¿Estamos obligados a ser corteses?
No sabría decir si existe algún reglamento que obligue a ello, pero sí que es cierto que el código de conducta del radioaficionado le exige ser cortés. Ahora bien, ¿Qué es ser cortés?
Tiraré de R.A.E. para que no haya dudas
adj. Atento, comedido, afable, urbano.
Aquí podría terminar porque, en realidad, no hay mucho más. En nuestras comunicaciones se nos exige precisamente eso, ser corteses. Sin embargo, las conversaciones o comunicados que realizamos los radioaficionados van mucho más allá de las que hacemos normalmente en nuestra vida diaria, hay muchos más matices, circunstancias y factores externos que afectan a ellas, por lo que, efectivamente, el término cortesía también se extiende a esas condiciones para adecuarse a un modo de comunicación muy distinto al que usamos habitualmente fuera del mundo de la radio.